domingo, 8 de agosto de 2010

Cronicas de un Mundo Diferente - Capítulo IV

Mi vida, Mi elección


Justo cuando se supone que me estaba acostumbrando a este mundo, viene algo que lo cambia todo y ¿Se supone qué ahora debo adaptarme de nuevo? No sabía si reírme o simplemente ver como la ironía de la vida seguía jugando a mi alrededor, de cualquier manera, tenía que seguir, porque aunque sea o no aquel candidato que buscan, siempre quise convertirme en cazador desde que llegue a este mundo.

Viendo el cielo estrellando, solté un leve suspiro nuevamente a la par que veía como una estrella fugaz cruzaba por mi vista, la cual bajé y vi un gran árbol viejo, con un tronco entrelazado.

Salté de mi ventana y caminé hacia el, donde me posé sobre su tronco por un momento y acto seguido escale hasta sentarme en una de sus ramas, desde donde se podía ver todo el pueblo o por lo menos, gran parte de el. Una brisa acaricio mi rostro y la nostalgia de lo que alguna vea pasó aquí, se me venía a la mente.

(Hace 12 años)

Sentado en el mismo lugar, escrutando el horizonte, mientras el sol se ocultaba, pensaba en lo que haría al crecer, pero mi pensamiento fue cortado por una voz de una niña que se acerco por detrás de mí – ¡Hola Dai-chan! – Dijo gritándolo en mi oreja, exaltándome y haciéndome perder mi postura, cayendo al suelo sobre mi espalda, el dolor no era tan molesto gracias a que caí sobre mis alas.

¿Estás bien? – Dijo la niña al saltar del árbol, notándose que era una zorra de pelaje rojizo, se paró a un lado de mí, mirándome con una sonrisa en su rostro ayudándome a levantarme.

– ¿Parezco estar bien? – Dije algo mareado, aunque dándole la espalda, le miraba volteando mi cabeza hacia ella con cara seria sin importarme el hecho de que se halla disculpado – De todas maneras, ¿Qué quieres? –.

– No seas un amargado, dime, ¿Sigues pensando en ese mundo inventado tuyo con “humanos”? – Dijo abrazándome.

– ¡No es inventado! Pero no estoy pensando en ello – Le respondí con una voz seca y una mirada decidida

– ¿Entonces? – Dijo extrañada mientras que sus cabellos morados rosaban mis mejillas, era solo dos años más grande que yo, así que se había agachado un poco para abrazarme.

– He decido convertirme en cazador, quiero descubrir que otras cosas existen en este mundo –

– ¿Estás seguro? – Dijo abrazándome más fuerte y con una voz apacible y cariñosa me dijo – No quiero que te lastimen – Quedando pensativa y hundiendo su cabeza en un costado de mi cuello.

– Tranquila, estaré bien, me volveré fuerte – Le dije esbozando una leve sonrisa de seguridad.

– Daisuke… – Su voz se iba apagando

(Presente)

El recuerdo, al igual que la brisa, se iba alejando, quedándome absorto de lo demás – Daisuke… – Escuchando su voz en mi cabeza repitiendo mí nombre.

– Daisuke – Curiosamente sentía que su voz cobraba más fuerza en mi interior y se volvía mas repetitivo hasta que – ¡Daisuke! – Escuche el grito en mi oreja proveniente de mi espalda, haciéndome caer al suelo sobre mi espalda, amortiguando el golpe con mis alas.

– Lo-lo siento su majestad – Dijo aquel ser que bajo de la rama y poniéndose a un costado mío trató de levantarme – Discúlpeme, pensé que si lo llamaba por su nombre, le resultaría más cómodo – Haciendo una reverencia ante mí – Lo vi tan pensativo y pensé que le ocurría algo –

– Ya… no importa – Lo mire algo aturdido, pero unos minutos después me paré bien.

– ¿Sucede algo? – Dijo preocupado y acercándose a mí.

– He decidió acompañarte e ir contigo al gremio – Dije seriamente, viendo como se alegraba por mi respuesta – Pero solo con una condición –.

Continúa Capitulo V “Lets hit the road”

1 comentario:

  1. Eh seguido tu historia desde que la publicaste, muy buena pero sigue siendo muy muy corta creo que puedes sacar muchas paginas en un solo capitulo solo tienes que dejarte llevar por tu propia historia. Aun así es una historia que me ah atrapado desde el primer capitulo.

    ResponderEliminar